5 Malos hábitos que todo emprendedor debería evitar

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5 Malos hábitos que todo emprendedor debería evitar

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Anonim

El espíritu empresarial puede ser la clave para vivir la vida en sus propios términos. Cuando tienes tu propio negocio, tomas las decisiones y no le informas a nadie más que a ti mismo. La idea de no tener jefe suena atractiva, pero como emprendedor, es importante recordar que en realidad tiene un jefe: usted mismo. Además, si desea que su negocio tenga éxito, a menudo tiene que ser un jefe aún más duro que el de sus nueve o cinco años.

Cuando te conviertes en tu propio jefe, lo más importante que debes obligarte a hacer es tener buenos hábitos empresariales y evitar los malos.

Fracaso en la planificación

La noción de que no planear significa fracasar es más que un viejo cliché. Un empresario debe prescindir de la idea de que tiene la autonomía para pasar sus días haciendo lo que le parezca oportuno en ese momento. Los empresarios más exitosos tienen días y semanas estructurados tan explícitamente como cualquier empleado de la oficina.

Además de planificar su tiempo, debe planificar su negocio. Tener un plan de negocios viable antes de tomar la zambullida empresarial es primordial. Establezca puntos de referencia fácilmente definidos y fácilmente cuantificables que pueda rastrear a intervalos regulares, y sea responsable de cumplirlos.

Asociaciones erróneas

Igual de atrayente que es iniciar un negocio para ti es hacer negocios con un amigo o pariente. Pocas ideas son más emocionantes que la de tomar una pasión compartida y trabajar juntos para convertirla en el trabajo de tu vida.

Desafortunadamente, las malas alianzas se ubican en la parte superior de la lista de problemas que causan el fracaso de pequeñas empresas incipientes. Elija a sus socios cuidadosamente. Es mucho más auspicioso tener un socio que comparta su visión y cuyas ideas y habilidades complementen las suyas que un socio que sea su mejor amigo, disfrute estar cerca, pero que traiga poco sobre la mesa en lo que respecta al avance de su negocio.

Expectativas poco realistas

Muchas personas inician negocios con la absurda noción de que se convertirán en millonarios, o al menos financieramente independientes, en los primeros meses. La realidad tiene poco parecido con esta idea falaz.

Con frecuencia, las pequeñas empresas que terminan teniendo grandes éxitos demoran un año o más antes de obtener beneficios o recuperar el capital utilizado para el lanzamiento. Al estudiar de cerca su industria, puede realizar proyecciones mucho más precisas y realistas sobre los ingresos que puede esperar que genere su negocio durante los primeros meses y años.

Promesa excesiva

A veces, los nuevos dueños de negocios están tan ansiosos por asaltar la escena y robar a los clientes de sus competidores que hacen promesas que son difíciles de cumplir.

Ejerza un poco de humildad y comprenda que otros lo han estado haciendo durante más tiempo que usted.Si las cosas que considera prometedoras son tan fáciles como las hace sonar, es probable que sus competidores ya las estén haciendo.

No hagas promesas audaces. En lugar de eso, gane clientes leales mediante el desarrollo de relaciones, el orgullo por su trabajo y una entrega excesiva de las promesas realistas que hace.

Falta de equilibrio entre el trabajo y la vida

Una de las principales razones por las cuales las personas se hacen empresarias es para escapar de la carrera de nueve a cinco. Como propietario de un negocio, usted tiene la flexibilidad de establecer su horario y trabajo cuando lo desee.

Esta autonomía suena como un sueño. Sin embargo, para muchos empresarios se convierte en una pesadilla, ya que no pueden establecer límites entre el tiempo de trabajo y el tiempo de juego. Como resultado, las relaciones y las amistades sufren y los pasatiempos se quedan en el camino.

El espíritu empresarial es un trabajo duro, y con frecuencia toma más de 40 horas por semana. Preserve su cordura reservando horas específicas todos los días cuando se desconecte completamente del trabajo y concéntrese en amigos, familia y pasatiempos.