¿Es un déficit de cuenta corriente bueno o malo para la economía?

Superávit alemán: ¿bueno o malo? (Noviembre 2024)

Superávit alemán: ¿bueno o malo? (Noviembre 2024)
¿Es un déficit de cuenta corriente bueno o malo para la economía?
Anonim
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El déficit en cuenta corriente, también denominado "déficit de balanza de pagos" o simplemente "déficit comercial", representa un desequilibrio fiduciario de divisas entre las importaciones y las exportaciones de un país. Cuando el valor en dólares de los bienes de consumo tangibles, como los automóviles de Suecia o los productos electrónicos de Japón, comprados a países extranjeros supera el valor en dólares de los bienes de consumo tangibles vendidos a países extranjeros, la cuenta corriente muestra un déficit. En la superficie, esto parece ser una pérdida neta para los Estados Unidos. De hecho, el cálculo de la economía estándar para el Producto Interno Bruto (PIB) sugiere inicialmente que cualquier déficit en la cuenta corriente reduce el PIB, lo que hace que EE. UU. Sea más pobre.

Muchos expertos, políticos e incluso algunos economistas lamentan el déficit comercial y dicen que es mejor para los estadounidenses consumir sus propios productos en lugar de comprar productos del exterior. Se enfocan en los impactos visibles a corto plazo y no en los impactos a largo plazo y casi invisibles. De hecho, comerciar con extranjeros no es diferente de comerciar con los locales y siempre es igual de beneficioso desde el punto de vista económico agregado.

Los estadounidenses compran productos extranjeros con dólares estadounidenses, que luego se transfieren a titulares de cuentas extranjeras. El titular de la cuenta extranjera solo puede hacer cuatro cosas con esos dólares: 1) darse la vuelta y comprar productos estadounidenses, 2) invertirlos en valores estadounidenses, 3) mantenerlos a perpetuidad y 4) cambiarlos por otra moneda.

El hecho de que exista un déficit de cuenta corriente demuestra que los extranjeros están invirtiendo / manteniendo más dólares que comprando bienes estadounidenses. Las inversiones regresan a las empresas o gobiernos estadounidenses en forma de capital, no de bienes de consumo, lo que impulsa el crecimiento económico. Los extranjeros que se aferran a dólares y nunca los usan están negociando bienes de consumo reales por papeles verdes, que en realidad es una ganancia neta para los consumidores estadounidenses. Por el contrario, las cuentas corrientes deben evaluarse en función del volumen, no del déficit ni del superávit.